El anuncio del presidente estadounidense Donald Trump de que impondrá aranceles del 25% a las importaciones de la Unión Europea y el acuerdo alcanzado con Mercosur han puesto en jaque al campo y desde Asaja muestran una gran preocupación por todas las consecuencias que puede llegar a tener. Pedro Barato, presidente nacional de la organización agraria, acudió ayer a Burgos para inaugurar la nueva sede y dejó claro que «si se ponen aranceles a los fertilizantes y se sigue por el camino que se va, volveremos a salir a la calle».
Sobre las últimas declaraciones de Trump y la preocupación por cómo afectará al sector, Barato valoró que «la situación no puede ser peor, va a haber situaciones complicadas si te ponen aranceles a lo que vendes y a lo que necesitas para producir...». Así, por ejemplo, considera que esto puede complicar mucho la vida a las explotaciones cuando los abonos ya están bastante caros actualmente.
Acerca del acuerdo con Mercosur, defendió que las condiciones para producir deben ser las mismas en todos los lugares y que eso no va a ocurrir así. Mencionó los problemas que tendrán los productores de remolacha, -«bastante ha pasado ya como para que ahora vengan más ataques»-, ya que en los países de Mercosur se puede usar un producto denominado neonicotinoides que aquí está prohibido, que allí se puede fumigar con avionetas o que aquí las hormonas -fundamentalmente para el ganado avícola- están prohibidas mientras en esos países no pueden controlarlo. Así, se lamenta que no se han conseguido las cláusulas espejo que tanto prometieron los partidos europeos y que el ganado resultará muy golpeado. Mientras, pidió que la nueva PAC no venga a «prohibir y limitar» y que «permita hacer las cosas con normalidad» y menos burocracia.
Por otro lado, Barato también expresó la importancia de que «el campo esté unido, especialmente a la hora de reivindicar y exigir a los gobiernos para tratar de buscar un bienestar». En ese sentido, dejó claro que volverán a salir a protestar a la calle si no se alcanzan acuerdos y no se les escucha. Eso sí, preguntado por posibles líneas rojas que se suelen establecer entre las diferentes organizaciones agrarias, dejó claro que ellos «jamás» han vetado a nadie y que «eso es cosa de otros».
Donaciano Dujo, presidente regional de Asaja, se quejó de que el cereal tiene actualmente el mismo precio que hace 40 años mientras los costes de producción se han multiplicado. «Eso nos supone producir más de 3.500 kilos de media para empatar con los costes», dijo. Esa es la principal preocupación. «Si Castilla y León es el granero de España, Burgos es el granero de Castilla y León. Así, sin duda alguna, es una de las provincias más afectadas», manifestó.