Menos mal que la estrategia de la Policía Local contra las carreras ilegales está dando sus frutos y se hallan bastante controladas porque por el momento en la Audiencia no halla colaboración en sus sentencias. Su sección penal acaba de tumbar un fallo del juzgado de lo Penal 2 de Burgos que condenaba a dos conductores prácticamente noveles a 15 meses de prisión por un delito contra la seguridad vial (conducción temeraria) y de otro de lesiones por imprudencia grave. El tribunal provincial ha estimado su recurso y los absuelve porque advierte de que «no se cuenta con suficiente prueba» que permita considerar que los procesados circularan en paralelo y frenaran bruscamente en la avenida López Bravo (Villalonquéjar), tras lo cual un coche que circulaba por detrás se empotró contra uno de ellos y una mujer resultó herida.

La sentencia del juzgado de lo Penal 2 estimó probado que el 5 de enero de 2019, a la 1 de la madrugada de un sábado, los coches de los acusados -que se conocían por redes sociales-, dos Volkswagen Golf GTI, transitaban en paralelo por la vía principal del polígono. Cuando se hallaban a 200 metros de una glorieta «frenaron bruscamente, sin motivo justificado, sino porque estaban haciendo una carrera». Al detenerse un BMW 320 no pudo frenar a tiempo, trató de esquivarlos pasando entre ellos, pero colisionó contra uno de los coches a entre 76 y 80 kilómetros por hora. Una mujer que viajaba en él resultó herida y fue evacuada después al HUBU. Los procesados salieron del vehículo, pero al ver lo ocurrido abandonaron el lugar.

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