El maletín de los arqueólogos del Proyecto Royales vendrá este verano más cargado. A los cubos, brochas, paletas y punzones tendrán que añadir una máquina de café para invitar a quienes se unan a la campaña que han lanzado en la plataforma Ko-fi, la esencia del micromecenazgo, puesto que se aceptan aportaciones a partir de 3 dólares.
Tacita a tacita. Así trabajan Alejandro Ramos y Raúl Rubio desde el inicio de su aventura para salvar de la destrucción total el puente de San Pedro Royales, que unía las orillas burgalesa y palentina del río Pisuerga en el Medievo y del que hoy solo queda 1 de los 8 arcos en pie. Y gracias a que intervinieron para consolidarlo en 2020, porque probablemente no hubiera aguantado otro invierno.
Del 1 al 14 de agosto desarrollarán la tercera campaña de excavaciones. «Por fin vamos a llevar a cabo sondeos en el lugar donde creemos que están los restos del hospital de peregrinos medieval» y en el que no saben si quedarán las estructuras o incluso la tumba de algún peregrino, puesto que ya el año pasado aparecieron restos humanos en las cercanías.
También continuarán excavando la vanguardia del puente hacia el sur, aguas abajo, un muro de protección «de unas dimensiones poco conocidas» para esa época, lo que añade valor a un «yacimiento único dentro del Medievo, porque ha quedado fosilizado, no ha sido reformado como el de Itero del Castillo u otros pasos», explica Alejandro Ramos, codirector de un proyecto que no despierta el mismo entusiasmo en todas las instituciones.
Así, mientras el Ayuntamiento de Herrera de Pisuerga se vuelca, y el de Rezmondo también, a través de la Diputación de Burgos, la de Palencia no participa en la financiación de la excavación, pese a que se ubica en su mayor parte en esa provincia, por lo que se ven obligados a recurrir a la colaboración de vecinos de Odra-Pisuerga, apasionados de la arqueología y amigos. «Cuesta mucho conseguir apoyos, incluso gente que nos conoce es reticente a donar, pero 3 euros no te quitan de nada, al menos no en Europa, y contribuyes a mantener un yacimiento especial», destaca Ramos, que añade que un sillar del puente llevará de manera simbólica el nombre de los participantes en la campaña (ko-fi.com/proyectoroyales) y que invitarán a café a todo el que vaya a visitarles (es de libre acceso todo el año). Sus pasos se pueden seguir en la web proyectoroyales.com.
Dependiendo del éxito del crowdfunding, llevarán a cabo también la segunda fase de consolidación del arco (zona del adarve). En 2022 participarán estudiantes de varias universidades españolas y, una vez superada la pandemia, también de Francia, para darle al Proyecto Royales esa dimensión internacional que le conectará con su pasado jacobeo. Los codirectores sostienen que por este lugar pasaba «una ruta alternativa, posiblemente más antigua, que la del Camino Francés, quizás la que estableció el rey Sancho el Mayor de Navarra en la época del Cid, un periodo muy importante para la configuración de Castilla», reseña Ramos.