Mirandés de nacimiento, Iñigo Sáenz de Ugarte dirige desde hace casi ya un año la planta de Hydro en Miranda de Ebro. Sostenibilidad y seguridad marcan el rumbo de una firma que producirá el primer aluminio 100% reciclable en el mundo. Sáenz prefiere no hacer previsiones a corto plazo, pero está convencido de que la compañía puede alcanzar hasta las 10.000 toneladas anuales de producción. 

Va a cumplir un año como director de la planta de Hydro aquí en Miranda. ¿Cuál es su balance  hasta ahora?
Está siendo una andadura bonita. Comencé el 1 de junio del año pasado y el cambio en la dirección de la planta también  ha venido marcado por un cambio en la estrategia de la compañía. Veníamos de unas estructuras y jerarquías en cada uno de los países y hemos cambiado. Ahora somos una matriz que tiene responsabilidades horizontales por cada uno de los segmentos. Nosotros estamos enmarcados dentro del área de operaciones.

A día de hoy, Hydro es una de las grandes empresas  situadas en Miranda de Ebro. ¿Por qué la compañía ha decidido apostar tan fuerte por la ciudad?
La estrategia de la compañía pasa por 5 pilares claros. El primero de ellos es el del crecimiento. Queremos ser los líderes del mercado mundial y tener por lo menos una participación de cuota de mercado del 20% en cada uno de los países en los que estamos presentes.

¿En qué se basa la producción de la firma en la ciudad?
A lo que nos dedicamos en la planta de Miranda de Ebro es a entregar sistemas de edificación. Típicamente, somos conocidos como una empresa de ventanas, pero entregamos todo lo que tiene que ver con sistemas de edificación. Pueden ser ventanas o puertas. Lo que nos hace un poco  diferentes respecto a otros competidores es que nosotros no solamente vendemos el aluminio, que es, digamos la base primaria de la Fundación de Hydro en Noruega, sino que lo que vendemos son todos los sistemas de herrajes, manetas, todo lo que tenga que ver con un sistema. Todo lo que puedas tocar en una ventana, salvo el vidrio, todo lo producimos nosotros.

Todo lo que puedes tocar en una ventana, salvo el vidrio, lo producimos nosotros»

Su mercado no solo abarca España, sino que también exportan internacionalmente.
Veníamos de tener un cliente básicamente nacional y portugués a nivel de península ibérica y desde el año pasado hemos aumentado nuestra cuota de participación con clientes externos. Ahora mismo Iberia representa más o menos el 50/55% de nuestro volumen. Y el otro 45% restante va para clientes en  Inglaterra, en Francia y en Bélgica.  Tenemos un mercado más amplio que el que teníamos en el pasado.

¿Qué previsiones tiene la empresa tanto en un futuro cercano como lejano?
Nadie hace 3 meses hubiese predicho que el señor Putin iba a invadir un país que está a dos horas de avión de Bilbao y nadie sabe lo que va a pasar el año que viene. Realmente los índices del mercado de la construcción vaticinan cierto sostenimiento para el año que viene, pero todas las indicaciones que tenemos del grupo es que las estimaciones y los planes de un negocio dejan de ser válidos en estos momentos. Así que realmente el plan de negocio de este año lo hicimos con crecimiento de en torno al 9%. Seguimos en la expectativa de alcanzarlo, pero realmente para el año que viene no sabemos.

La guerra entre Rusia y Ucrania, la subida del combustible y la luz. También la crisis que hubo de transportistas. ¿Cómo lo ha vivido en la planta?
Realmente no hemos tenido una gran afectación por la crisis del transporte. Trabajamos con compañías grandes que no se han visto afectadas. Hemos tenido algunas pequeñas dificultades con las entregas en el norte de España, pero en el resto de la península lo hemos entregado sin  dificultades y donde sí que estamos teniendo bastantes tensiones es con el acopio de materia prima y con el alza de los precios de energía. Ahora mismo es el principal problema. Tenemos que ser capaces de trasladar al mercado estos incrementos de costes energéticos en un aumento de nuestros precios de venta para acomodar y seguir manteniendo márgenes. Este proceso no siempre es rápido y en ello estamos.

Hace dos años la idea de la empresa pasaba por una conversión en una planta integral. Unificar la extrusión, el lacado y la logística. ¿Qué ha supuesto esto para la producción?
Esta es nuestra carta de presentación y el proyecto principal del equipo de dirección que estamos en Miranda ahora. Históricamente hemos tenido dos entidades de negocio debajo del mismo techo. Con dos direcciones, con departamentos en algunos casos duplicados, con objetivos duplicados. Y eso ha cambiado. Otro de los planes que tenemos es el de la One Company y a partir de ahora lo que estamos tratando es de buscar sinergias en donde no las teníamos ahora mismo. En ese sentido, estamos ahora mismo en un proceso de cambio. Estamos embarcados en unificar los sistemas de información y los sistemas de planificación. También estamos haciendo cambios físicamente en la planta. 

La vida de las personas es lo más importante y la seguridad de nuestros empleados es nuestra razón de ser»

Salía a la luz hace unos meses que Hydro quería alcanzar las 10.000 toneladas anuales de producción a medio plazo. ¿Aún continua con esa intención?
Nuestro plan de negocio de este año son 9.100 toneladas y estamos todavía en el proceso de seguir mejorando las productividades para alcanzar el objetivo que nos habíamos puesto anteriormente. 10.000 toneladas sigue siendo un objetivo en el medio plazo. 

El Consejo de Cámaras de Miranda de Ebro incluyó durante el año pasado a Hydro como un ejemplo dentro del desarrollo sostenible. ¿Es esta una de las máximas del grupo?
Todas las inversiones que hacemos en esta planta tienen que ver con la circularidad y con el crecimiento propiamente sostenible. No hay ninguna inversión ni de un euro ni de un millón de euros que no se marque dentro de nuestra estrategia.

Una de las cosas que más caracteriza a la empresa es el tema de la seguridad. Organizan cursos, los trabajadores toman todo tipo de medidas. ¿Es esta una de las señas de identidad de Hydro?
No puede ser de otra manera. Nosotros pensamos que la vida de las personas es lo más importante y la seguridad de nuestros empleados es nuestra razón de ser. Están los clientes, están los resultados, pero no pueden venir acompañados de no tener seguridad en las operaciones. Es la firme promesa a nuestros accionistas y es la firma de promesa de los directores de las plantas y los equipos de dirección de velar siempre por la seguridad de los empleados.

Tratándose Hydro de una de las firmas que más puesto de trabajo aporta en la ciudad. ¿Cómo ve la situación actual del tejido empresarial aquí en la ciudad de Miranda? 
Somos unos firmes convencidos de que tenemos que apostar por  incrementar el tejido empresarial y no solamente eso, sino también de colaborar con los centros de formación. Creo que actualmente tenemos a 3 personas y todo los que está nuestras manos lo decidimos apostar porque nos parece importante hacer marca de Miranda.

Las inversiones tienen que ver todas con la circularidad y el crecimiento sostenible»