Sin apenas tiempo para saborear el espectacular triunfo logrado el domingo en Badalona, el Hereda San Pablo regresa a la competición y lo hace esta noche (21,15 horas) frente al Retabet Bilbao Basket. Con todo el mundo haciendo las cuentas para la Copa del Rey, un triunfo dejaría al equipo burgalés virtualmente clasificado, pero no matemáticamente ya que debería esperar al próximo fin de semana y ver, sobre todo, el rendimiento del Andorra, al que le restan cuatro partidos por disputar y podría igualar con el conjunto burgalés.
Real Madrid, Iberostar Tenerife, Barcelona y Baskonia ya están clasificados. El Hereda San Pablo es el quinto (10 victorias y cinco derrotas) y solo un rocambolesco cruce de resultados lo dejaría fuera. Lo primero es ganar hoy y luego esperar a lo que hagan el resto de equipos metidos en esta lucha. Al equipo burgalés le restan tres partidos y su principal amenaza puede ser Andorra, que debe jugar cuatro y ahora tiene 7 triunfos, aunque debería ganar todos sus encuentros, entre ellos ante Baskonia y Real Madrid.
Pero más allá de todas las hipótesis, el primer y único objetivo del Hereda San Pablo es derrotar hoy al Retabet Bilbao Basket y seguir creciendo en la Liga Endesa, donde ahora mismo disfruta de su quinta plaza. En Badalona el equipo de Joan Peñarroya ya demostró su enorme capacidad de reacción y su potencial, en una segunda parte espectacular. Jugando a ese ritmo será difícil que hoy se le escape la victoria.
Enfrente tendrá a un Retabet Bilbao Basket muy necesitado de victorias. El conjunto vasco fue una de las sensaciones de la pasada temporada. De hecho se clasificó para la Copa en la última jornada tras ganar al Barcelona. Sin embargo perdió a parte de sus mejores jugadores y además se ha visto machacado por las lesiones, especialmente la de su gran referencia en el juego interior, Balvin, lesionado de larga duración.
Los responsables deportivos del conjunto vasco han ido recomponiendo el equipo sobre la marcha y en las últimas semanas han llegado jugadores como Huskic o Aminu para reforzar su poder en la zona; o John Jenkins buscando los puntos desde el perímetro.
Marchan con tres victorias y doce derrotas y llegan a Burgos después de perder en su cancha ante el Unicaja de Málaga este mismo domingo. Con la lesión de Balvin perdieron a su mejor anotador, con casi 13 puntos por partido, además de un seguro en la lucha por el rebote. El escolta Jaylon Brown recogió el testigo y promedia algo más de 12 puntos por encuentro, mientras que Rousselle está en 10,4 puntos y Zyskowsky en 10,8. Con Jenkins han buscado otra referencia ofensiva clave y el escolta norteamericano, en sus dos primeros partidos de ACB con el equipo vasco ya promedia algo más de diez puntos por encuentro, cifra que seguro que aumentará con el paso de los partidos, cuando logre una mayor aclimatación al juego de su nuevo equipo.
Joan Peñarroya. El entrenador del Hereda San Pablo no quiere hablar de la Copa del Rey hasta que la clasificación esté asegurada y se centra únicamente en el partido de esta noche.
«Tenemos la intención de despedir el año con una victoria», declaró el preparador catalán, recordando que apenas han tenido 48 horas para preparar este choque. «Nos hemos preparado todo lo bien que podíamos para afrontar un duelo importante contra Bilbao».
Peñarroya recuerda que su rival de esta noche llega «con necesidad de victorias». «Ha cambiado su roster tanto por situaciones físicas como por la necesidad de intentar dar un plus más de calidad a su plantilla», explicó, sobre un rival que ha perdido a piezas claves como Quentin Serron y Ondrej Balvin y que ha obligado al club vasco a buscar soluciones en el mercado, con fichajes como los de Huskic o Jenkins, al que Peñarroya define como «una amenaza exterior muy importante. Es un jugador con una gran capacidad de anotación y con capacidad de desequilibrio individual para cambiar dinámicas de partido». «El Retabet Bilbao Basket es un equipo que tiene jugadores que te pueden causar muchos problemas y si no estamos a nuestro nivel, difícilmente vamos a conseguir nada bueno», concluyó el entrenador del Hereda San Pablo.