Una conexión prometedora

C.P. / Burgos
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Curro Sánchez y Fer Niño se entendieron muy bien en el amistoso contra la Cultural Leonesa y prometen ser una sociedad muy productiva para el Burgos CF. Generaron mucho peligro con balones al espacio

Curro Sánchez y Fer Niño, jugadores del Burgos CF. - Foto: Valdivielso

El fichaje de Fer Niño por el Burgos CF ha generado mucha expectación este verano y, aunque todavía no ha conseguido marcar su primer gol, ya ha dejado pinceladas de lo que se puede esperar de él. El delantero gaditano demostró ante la Cultural Leonesa que es capaz de asociarse bien y que se encuentra muy cómodo con balones al espacio. En ese tipo de acciones se entendió a la perfección con Curro Sánchez, en lo que promete ser una conexión que le va a dar muchos réditos a Bolo. 

Fer Niño disputó la primera parte del duelo contra la Cultural y gozó de dos ocasiones, una de ellas muy clara. Ambas llegaron con balones al espacio por parte de Curro Sánchez: primero le sirvió un gol en bandeja que el ariete roteño no supo culminar y después realizó un desplazamiento largo para que su compañero le ganara la espalda a los centrales. Esta vez fue el guardameta el que evitó el tanto. «Tenemos buenos pasadores y me he encontrado muy cómodo jugando a la espalda. Han sido pases perfectos», señaló el atacante, que destacó su «buen entendimiento con Curro Sánchez».

Entre los dos llevaron peligro a la portería leonesa en una primera parte en la que la única amenaza fueron los balones largos. De hecho, en una de esas acciones se zafó de los centrales y solo pudieron pararle con una entrada que hizo saltar las alarmas. «Venía tocado del tendón de aquiles y me hizo bastante daño, pero estoy bien. Estoy al 100% para jugar contra el Sporting», explicó. 

De momento, Fer Niño aseguró que cada día se encuentra «con más ritmo» y que la conexión con sus compañeros va mejorando. «Solo falta el gol, que llegará», añadió.

Además, dijo que se siente a gusto jugando solo o con un compañero en la punta de ataque y elogió también el trabajo de Edu Espiau (...).

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