La tensión en el Ayuntamiento crece por el recorte de las horas extra a los trabajadores laborales. La nueva política de la Concejalía de Personal ha provocado que en el final de 2024 y el inicio de 2025 incluso haya departamentos en cuadro, porque ante la amenaza de perder los días libres incluso hay quien ha cogido varios meses. Los sindicatos apuntan a la nueva regulación del saldo horario, y aunque incluso la ven como necesaria, consideran que la administración local debe actuar en el fondo del problema, porque con el personal existente y los servicios que se asumen, la situación se repetirá.
La medida afecta en especial al personal de servicios, como las brigadas de obras o vías públicas, pero también hay otras áreas salpicados como el Polideportivo. En los últimos años, la bolsa de días pendientes entre los trabajadores ha crecido y desde la Concejalía se quiso poner freno, ya que había casos de 300 o 400 horas en cartera. Los laborales pueden cobrar hasta 80 al año y el Ayuntamiento a partir de esa cantidad las compensaba, aunque ahora se ha puesto un límite de 35 para reducir la cifra y todo lo que supere esa cantidad pasado un tiempo se pierde.
El problema está en que en ocasiones «para después de San Juan del Monte ya hay gente que ha llegado a las 80 horas», afirman en CGT, por lo que para asumir todas las labores se necesita que la plantilla colabore, «aunque luego hay casos que por necesidades del servicio tampoco se deja disfrutarlas», advierten en Comisiones Obreras, donde dudan de la legalidad de suprimir el saldo si realmente se ha bloqueado el disfrute por necesidades del servicio.
Entre los sindicatos, incluido Csif, consideran que esta encrucijada «es consecuencia de que se están acometiendo muchos servicios y el personal sigue siendo el mismo desde hace un montón de años», aclaran en CGT. Por eso, los sindicatos avisan de que el Ayuntamiento debe actuar.
Hay empleados que han llegado a acumular 300 o 400 horas, algo que se quiere evitar
Las medidas más evidentes pasan por sumar plantilla o reducir el número de actividades acometidas por el personal municipal. En Csif, recuerdan que el criterio de las 35 horas lleva «toda la vida», aunque en los últimos años, en especial tras la pandemia, ese límite se ha relajado y se han generado grandes excedentes por el aumento en los trabajos. Por eso, demandan una planificación laboral realista en base a todas las necesidades que ya se conocen, porque se repiten año tras año.
Los representantes mencionan, por ejemplo, la cantidad de escenarios que se montan en los barrios o el aumento en las localizaciones para fiestas patronales, sin contar la colaboración con las asociaciones con las casetas, algo que «también hay que valorar» recalcan en Csif. «Todo eso se hace en base a horas de los trabajadores», afirman en CGT, porque además muchas de las actividades en las que se ayuda obliga a actuar fuera del horario del personal laboral. «Lo que nos tenemos que plantear es si estamos abarcando más de lo que podemos», afirman en CCOO, donde consideran «inmoral» que pese a superar el límite de 80 horas se siga pidiendo un esfuerzo.
Una solución, aunque no resulte la ideal para los sindicatos, pasa por subcontratar ciertos trabajos, «como se hace por ejemplo en parques y jardines», un departamento en el que dada la escasez de empleados la Concejalía externaliza tareas. Lo que está claro es que la situación actual «no es sostenible», lamentan en los sindicatos, donde esperan medidas, «aunque por ejemplo para la brigada de obras aún no han dado ninguna propuesta para poder solventar este problema», lamentan en CCOO.