El serrano Jero Martín, entre estrellas y multitudes

R.M. / Burgos
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El futbolista de Vilviestre del Pinar estuvo en México tres semanas jugando con el Saiyans en la Kings League ante más de 50.000 hinchas y compartió césped con jugadores de la talla de Hazard o Totti

Jero Martín llegó hasta las puertas de la final con el Saiyans y asegura que volverá a jugar el próximo año en la Kings League. En la imagen, hace unos días en el Estadio Rayados de Monterrey (México) ante 50.000 espectadores.

El burgalés Jero Martín sigue acumulando experiencias gracias a la Kings League, un torneo de fútbol creado por Gerard Piqué que va más allá del deporte y en el que los dueños de los equipos son algunos de los influencers o youtubers más importantes de España. El ex del FC Barcelona quiere que su proyecto traspase fronteras, por lo que en el mes de junio México fue el escenario de una competición mundial con presencia de equipos de otros países que tenían como padrinos a futbolistas de la talla de Francesco Totti, Eden Hazard, Radja Nainggolan o de Alessandro Rosa Vieira 'Falcao', el considerado mejor jugador de fútbol sala de todos los tiempos.

En lo estrictamente deportivo, el equipo de Jero, el Saiyans, alcanzó la final four y el de Vilviestre del Pinar jugó ante el 50.000 espectadores en el estadio Rayados de Monterrey. Reconoce que regresó «enfadado» porque vieron la final muy cerca, aunque viéndolo con perspectiva se queda «con la experiencia». «He estado tres semanas jugando contra gente que ha sido profesional y ha jugado a un altísimo nivel, la competición ha sido muy bonita. Llegar a la final four lo hubiera firmado antes de empezar y además jugamos con el estadio abarrotado», comenta.

En México se volvió a sentir una estrella y es que asegura que la afición es «mayor que en España».«Aquí te conocen los niños, pero en México sabían quién era mucha gente. Todo esto era nuevo para mí. Se lleva bien, aunque en ocasiones no sepas cómo actuar, pero al final ese cariño de la gente es lo que más se agradece», comenta.

No tuvo demasiado tiempo para hacer turismo y es que la competición les condicionó sobremanera su estancia. «Hemos competido mucho. Ha sido muy exigente físicamente, creo que demasiado. Ha costado adaptarnos a la alimentación y a la altura, muchos nos hemos puesto malos por el agua, porque aunque nos lo avisaron a veces no te das cuenta», explica el serrano.

(Más información, en la edición impresa de este lunes de Diario de Burgos)