La historia del enfado protagonizado la pasada semana por la alcaldesa, Cristina Ayala, por la ausencia de taxis en la estación Rosa Manzano ha generado malestar en el sector. Este hecho coincidió, además, con la reciente reunión mantenida entre el Ayuntamiento de Burgos y los profesionales, un encuentro en el que concejal de Movilidad apremió a los conductores para aumentar su presencia en los puntos de recogida.
José Antonio López subraya la «falta de coches en algunas paradas» y se marca de plazo el inicio de 2024 para encontrar una solución firme a esta circunstancia. El Consistorio se mantiene ahora a la espera de las propuestas del taxi en un momento importante porque aún no se han resuelto sus alegaciones al nuevo Reglamento.
Los contactos mantenidos para la adaptación del texto redactado en 1994 se toparon con la intención del Ayuntamiento -ya con el anterior equipo de Gobierno- de ampliar la flota de este servicio hasta un máximo de 204 coches al aplicar el ratio de un vehículo por cada 850 habitantes. López destaca que esta propuesta cuenta con el «consenso político» e implicaría un aumento de 18 licencias. Actualmente hay 186, 12 más de las señaladas en el actual ratio aplicado de un coche por cada mil habitantes.
Este planteamiento encontró el rechazo del sector, el cual alegó que la población no crece tanto como para dar más licencias. Además, los taxistas consideran que esta decisión es competencia de la Junta de Castilla y León. El expediente avanza y López asegura que estas alegaciones se resolverán «en breve», pero la cuestión sigue sobre la mesa (...).
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