Mauricio Muñoz no tendrá vía libre para revalidar su cargo al frente de la Audiencia Provincial de Burgos. Como ya sucediera en las elecciones de 2015, Blanca Subiñas, exjueza decana y magistrada en la Sección Primera, optará a la presidencia del tras presentar a última hora su candidatura. También lo hará en el proceso abierto para dirigir el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, otra de las plazas vacantes tras expirar el mandato de José Luis Concepción tras casi dos décadas.
Subiñas fue la titular del Juzgado de Menores durante 15 años, periodo en el que también fue la jueza decana de Burgos. Estudió derecho en la UBU y estuvo destinada en Monforte de Lemos, Miranda de Ebro y Tarragona antes de recalar en la capital. Ha sido miembro del Consejo de Gobierno del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León y, desde 2022, ocupó de forma interina uno de los sillones de la Sala de lo Civil y Penal de este mismo órgano.
En 2023 consiguió una plaza de magistrada de la Sección Primera de la Audiencia Provincial, encargada de asuntos penales, a la que deberá reincorporarse una vez concluyan los procesos de nombramientos tras la renovación del Consejo General del Poder Judicial. Resolver el colapso en de este tribunal, que a día de hoy señala a dos años vista y duplica el volumen de trabajo de provincias vecinas como León o Valladolid, será uno de sus principales objetivos si consigue la presidencia.
Esta es la segunda candidata conocida tras saberse que el actual presidente, Mauricio Muñoz, optará ambién a la reelección. Precisamente fue elegido en 2015 tras imponerse a la propia Subiñas, a Ildefonso Barcala, de la Sección Segunda, y Luis Antonio Carballera. Ha permanecido en el cargo durante cuatro años en funciones al no permitirse los nombramientos mientras durase el bloqueo en la renovación del Consejo General del Poder Judicial. Es decir, que casi ha estado dos legislaturas en el cargo.
Se abre ahora un largo plazo de elección que corresponderá al órgano de gobierno de los jueces. Por un lado, tendrán en cuenta los méritos de excelencia jurisdiccional, por ejemplo el tiempo dentro de la carrera judicial, de ejercicio en órdenes penal y civil, en órganos colegiados o su experiencia en puestos análogos de especial relevancia (fiscalía, abogacía del Estado...).
(Más información, en la edición impresa de este jueves de Diario de Burgos o aquí)