Las tres décadas que llevaban los burgaleses aguardando la llegada de la Alta Velocidad a buen seguro que impulsaron al AVE inaugural a llegar con 3 minutos de adelanto sobre el horario previsto. El convoy partió desde el andén 21 de la terminal Madrid-Chamartín-Clara Campoamor a las 11 en punto de la mañana, mientras que hizo su entrada en Burgos-Rosa Manzano a las 12:30 horas. El viaje de 90 minutos recortó en 180 segundos la duración que estima Renfe tendrán los trayectos entre la capital castellana y la de España una vez arranque el servicio comercial hoy viernes.
El 21 de julio de 2022, al día siguiente de celebrar el 801 aniversario de la colocación de la primera piedra de la Catedral, también pasará a la historia como uno de los capítulos más importantes para la ciudad y la provincia. Burgos ya puede imponerse el adjetivo de 'ciudad AVE', un reconocimiento que, pese a llegar mucho más tarde de lo deseado y prometido, se vivió con gran expectación. La jornada arrancó en Madrid, origen de la Línea de Alta Velocidad que pretende conectar España con Francia.
(El reportaje completo desde dentro del tren, toda la información de este evento histórico y amplio despliegue gráfico, en la edición de papel de hoy de Diario de Burgos)