Luis Miguel de Dios

TRIGO LIMPIO

Luis Miguel de Dios

Escritor y periodista


Pax romana

15/10/2024

Llevo unos cuantos días sin leer ni oír nada nuevo sobre la crisis interna del PSCyL-PSOE y el enfrentamiento entre la Ejecutiva Autonómica (o parte de ella) y la Federal. De repente, han cesado las declaraciones punzantes, las acusaciones y los comunicados. Ya nadie dice nada. ¿Eso significa que han cesado las hostilidades y que el follón se ha solucionado? Pienso que no. Creo que ha llegado una Pax Romana que, de momento, tapa las broncas cainitas a las que nos tiene bastante acostumbrados el PSOE regional. ¿Ha tirado Tudanca la toalla a la vista de las supuestas maniobras orquestadas desde Ferraz para descabalgarle? No hay nada que lo confirme. ¿Ha desistido Ferraz de buscar relevo al actual secretario del PSOE castellano y leonés, cargo en el que lleva ya diez años? Me parece que no. El problema, en este caso, es que no se encuentra un candidato dispuesto a dar el salto. O lo impone por las bravas Pedro Sánchez (y de eso sabe bastante) o lo tendrán que rifar y a ver qué pasa. Las perspectivas no son nada halagüeñas, aunque el PP (Mañueco) está ahora en un relax muy preocupante, sobre todo para el ciudadano. Aunque no vayan a sacar adelante los presupuestos del 2025, no temen ni una derrota ni un retroceso electoral. Dicho esto, digo también que no creo que don Alfonso Fernández Mañueco se atreva con otro adelanto de los comicios regionales. Sería una irresponsabilidad por mucho que haya gentes que le animen para pillar al PSOE en calzoncillos, en  batallas intestinas y sin un candidato claro o poco conocido. A  mi juicio, no es nada de eso lo que precisa Castilla y León, que sigue sin despegar en algo tan esencial como el frenazo a la despoblación o la mejora de los servicios más esenciales. Y sigue esperando, claro, que se aclare lo de la financiación, aunque esto no sea solo cosa suya; me temo que el asunto va para largo y no va a arreglarse con otras elecciones ni aquí ni en toda España. Y así andamos estos días otoñales: un rato mirando al cielo, otro al PSOE y otro a los anuncios que hace cada jueves Carriedo y que nos insuflan un optimismo que para sí quisiera hasta  Ayuso. Hay que reconocer que somos unos privilegiados.