El desplazamiento a Tenerife no es un viaje más para Luis Miguel Ramis. El pasado del entrenador del Burgos CF está ligado al club del Heliodoro Rodríguez López como futbolista y después como técnico. La camiseta del conjunto chicharrero es la que más veces ha vestido como jugador de Primera División, mientras que es también al equipo que más partidos ha dirigido en Segunda. Será un choque especial para el tarraconense, que es una voz autorizada para hablar de la entidad isleña y que además lo hace con ese sentimiento de pertenencia tras haber pasado cinco años de su carrera deportiva en la escuadra canaria.
Llegó al CD Tenerife en la temporada 94-95 procedente del Real Madrid y en la isla se hizo un hueco en la Primera División. Disputó 60 partidos en dos temporadas y posteriormente se fue al Sevilla. En su faceta como entrenador, se hizo cargo del equipo en la jornada 14ª de la campaña 20-21 sustituyendo a Fran Fernández. Salvó la categoría sin apuros y el punto álgido llegó el siguiente curso. Se metió en el play off como quinto clasificado y después de superar a Las Palmas en la primera eliminatoria cayó en la segunda contra el Girona. Se quedó a un paso de ascender a Primera.
Por todo lo anterior, Ramis reconoce que se trata de «un viaje especial».«Es de esos partidos en los que tienes que generar dos espacios en tu cabeza, pero como profesional estoy más centrado en uno que en el otro», responde el blanquinegro, dejando claro que mañana prevalecerán los intereses del Burgos CF más allá de los sentimientos personales que le aflorarán en esta cita. Insiste en que se va a «focalizar en el partido sin ninguna duda» y añade que deben «sacarlo adelante y tener esa eficacia que han mostrado en las últimas semanas».
Sabe que el choque y el escenario harán que lleguen antiguos recuerdos, muchos de ellos positivos. «Ese otro ámbito trataré de aparcarlo los 90 o 95 minutos que dure el partido, que va a ser un difícil para nuestros intereses porque sé lo que es ese campo, lo que son esos jugadores y lo que es esa afición, que aprieta mucho», advierte.
Ramis tenía claro que el Tenerife reaccionaría y por desgracia se cruza con el Burgos cuando atraviesa el mejor momento de la temporada. «Es un buen equipo, cuenta con jugadores importantes y lo que necesitaba era tranquilidad para poder trabajar. Tenía demasiada suciedad alrededor del equipo y eso les perjudicaba mucho», explica.
El conjunto chicharrero ha ganado en estabilidad, lo que le convierte en un rival más peligroso. «Además tienen la mirada al frente, más tranquilidad y están expresando todo lo que llevan dentro. Hay que añadir la ayuda de un entrenador que ha llegado con las ideas muy claras y que ha conseguido convencer a la plantilla», comenta (...).
(Más información, en la edición impresa de Diario de Burgos de este viernes o aquí)