En Burgos hay dos maneras de disfrutar las fiestas: como espectador o como peñista. Los primeros, no se engañen, nunca podrán sentir lo mismo que los segundos. Unos forman parte del público y otros son protagonistas. En la Iglesia de la Real y Antigua de Gamonal nos esperan puntuales Daniel Ortega y Raquel y Marina García, tres orgullosos integrantes de la peña Los Gamones, que este año celebra su 30 aniversario. El lugar de encuentro no es casual.El espacio en el que ahora hay coches y solo se escucha el ruido de los motores, en los Sampedros será punto de partida de la cabalgata y lugar de encuentro y de algarabía para varios miles de peñistas de la ciudad.
Coinciden Raquel y Marina en que sus momentos preferidos de las fiestas son la cabalgata y la bajada de los toros. Para Daniel, los Sampedros arrancan el día del Parral (este año en la Quinta). Aunque no está en el programa, el día en que se rescata el buzo y la blusa del fondo del armario es ya el inicio de todo. En un abrir y cerrar de ojos llega ya el chupinazo y el pregón.
Este año, los Sampedros van a ser especiales. Los Gamones, que cuentan con unos 360 miembros, recuerdan con mucho cariño y con alguna que otra cana que han pasado ya tres décadas desde que un grupo de hosteleros y clientes de las Bernardillas fundaron la Asociación Cultural Recreativa Plaza Roma, germen de la actual peña.
Aquellos 30 o 40 fundadores han evolucionado en «una gran familia» mucho más numerosa y que comparte aficiones durante todo el año. En los Sampedros, además, lo que toca es darlo todo.Daniel, que todos los años reserva unos días de sus vacaciones para las fiestas, define su peña como «pura vida. Un viaje infinito hacia la diversión en la familia que uno ha elegido. Una criatura a la que vi dar sus primeros pasos y que nos ha proporcionado mil y una emociones grabadas a fuego». Se muestra orgulloso de que en su día los Gamones «irrumpieron como un ciclón en el panorama peñístico local, rompiendo moldes y pisando fuerte».
En el resto de peñas de la ciudad hay otros muchos burgaleses como Daniel que sienten los colores de sus blusas como el símbolo de unión de una gran familia de amigos. Raquel y Marina han heredado su amor por los Gamones de sus padres y para esta última los Sampedros de este 2024 serán especiales porque los vivirá como la reina de la peña. Para ella, representar a los suyos es un «motivo de orgullo».
El nuevo formato de las fiestas, reducido a una semana, defienden que habrá que valorarlo después aunque lo suyo habría sido que arrancarán «un viernes o la víspera de un festivo». Respecto al Curpillos, la nueva ubicación provisional de la Quinta les ha gustado y apuestan porque se mantengan. Las fiestas son suyas.