Si algo tiene el deporte para los aficionados es que los disgustos se pasan rápido. Parece que ha pasado una eternidad desde el pasado fin de semana y todo porque en apenas unos días hemos leído ya los ambiciosos planes de futuro del Burgos CF o la oportunidad que aún tiene el UBU San Pablo de ascender a la Liga Asobal si vence al Cangas.
El fin de semana de los disgustos en la capital se vieron aminorados, es importante decirlo, por la buena noticia de que sea Aranda quien se haya garantizado una plaza en la máxima categoría del balonmano español tras un fin de temporada absolutamente espectacular.
Conviene recordar que no es fácil que Aparejadores haya ganado dos títulos este año y que solo una derrota por la mínima haya privado al equipo del triplete o que en baloncesto haya licencia para soñar. El San Pablo tiene garantizada su presencia en la final four y esperemos que el Tizona les acompañe y que a uno de los dos los podamos ver el próximo año en la ACB.
Conviene recordar que hace no mucho tiempo los titulares eran otros. En Burgos nos hemos acostumbrado a hablar de deporte y conviene valorar lo bien que se están haciendo las cosas para felicitar a los jugadores, pero también a unos dirigentes que han apostado para poner a la ciudad en el mapa. No podemos olvidarnos de los que siempre han estado y siguen en la pomada: nuestros atletas, la gente del ciclismo, del tenis de mesa, del judo, de la esgrima... También de nuestra campeona del Dakar, de nuestra campeona en natación, Marta Fernández, o de la gran promesa del skate, Alan Sardiña.
Estamos orgullosos de todos vosotros y de lo alto que dejáis el nombre de Burgos allí donde vais. Gracias.