El Mercado Norte provisional será una realidad mañana y los comerciantes ya están ultimando los preparativos de cara a la apertura. El género va ocupando su sitio, los precios se van colocando sobre los productos y la expectación va creciendo entre quienes caminan por los alrededores y ven el trasiego que tienen en el interior. "Tengo ganas de verlo. Mañana por la mañana vendremos seguramente", comenta Dori, clienta habitual del antiguo emplazamiento.
Entre los ruidos del interior los vendedores dan el último empujón a una cuenta atrás que se inició el pasado sábado. "Hemos estado aquí cinco días de ocho de la mañana a ocho de la tarde", declara Carmen, del puesto de frutas Antonio. Les hay más estresados, que tratan de solventar fallos de última hora y hay quien mira desde la tranquilidad de tener ya todo preparado. El colorido de las frutas, la carne y los quesos ya están esperando la entrada de los clientes.
"Esperamos que venga incluso más gente que en el antiguo mercado", apunta Mari Carmen, de Quesos Mari Carmen, mientras comenta que ya nadie va a tener la excusa de que no funcionan las escaleras para no acudir a su parcela.