Gadea G. Ubierna

Plaza Mayor

Gadea G. Ubierna


El mundo de Ana

21/03/2025

Hoy es el cumpleaños de Ana. Doce. Y es también el día en el que me pregunto qué mundo estamos creando para ella y sus coetáneos. Para Gadea, Elvira y Diego, para todas esas otras jóvenes, niñas y niños que ya cargan la enorme responsabilidad de enderezar lo que nosotros hemos puesto del revés. Algo que, encima, deben hacer encajando pautas contradictorias, porque nada tiene que ver lo aprendido en casa con lo que se ve fuera

Desde que nacen, les repetimos que lo más importante es ser buenas personas, que hay que respetar siempre al otro, que la violencia no es medio para ningún fin, que hay que ponerse del lado del más débil, ayudar a la víctima y socorrerla, que el dinero no lo es todo, que el esfuerzo merece la pena y que los demás seres vivos que habitan la Tierra tienen el mismo derecho que nosotros a estar aquí. Pero si levantamos la cabeza para mirar alrededor, vemos que poco o nada de lo que le enseñamos a Ana parece servir hoy

El mundo está en manos de hombres que hacen gala del uso de la violencia, que se jactan de su codicia creciente, que solo entienden la ley del más fuerte y que presumen de su constante desdén hacia los débiles. Parecen, incluso, disfrutar con el sufrimiento ajeno. Pero dirigen este mundo y lo peor no es que haya quienes aplauden y creen en estas prácticas de matones, es que hacen suyo el mensaje y lo extrapolan a su día a día. Así, llegamos a que a unos pobres críos que huyen de la miseria se les despoje de su condición de seres humanos aplicándoles el término «mena» y se hable de su reparto, cual manzanas, sin que nadie se escandalice. Llegamos a normalizar la guerra y la negación de la violencia de género -Andrea no falleció, fue asesinada- o la avaricia como política cotidiana. Es una pena de mundo el que dejamos a nuestras niñas, niños y jóvenes; ojalá que sepan cómo reconstruirlo.