Llevo unos días leyendo en la prensa no sé qué pajolera idea de Borja Suárez respecto de la capitalidad de Burgos para la DO Ribera del Duero (incluso para la del Arlanza) y se me ocurre que no entiendo nada de nada de la política. Todo son dudas.  Y las voy a plantear aquí y, si su paciencia me lo permite, las responderé hasta donde mi entendimiento pueda. 

¿Dónde estaba Burgos capital en los inicios de la DO, cuando todo eran esfuerzos y no había ningún beneficio?, ¿qué apoyo se recibió entonces en la Denominación de Origen desde la capital? Creo que ninguno.

¿Por qué en Burgos capital, hasta más o menos el año 2000, era más fácil encontrar un Rioja que un Ribera en cualquier bar? Porque no creían en nuestros caldos, pensaban que eran inferiores y fomentaban su competencia directa, el Rioja.

¿No es la Diputación el organismo destinado a defender y gobernar poblaciones de menos de 20000 habitantes? Entonces ¿qué hace sosteniendo una idea que beneficia a Burgos y solo a Burgos? Creo que Burgos, Aranda y Miranda no tienen representación en la Diputación; sus intereses se defienden en otros pagos. Y, además, estos NO son sus intereses.

¿Cuántas cepas tiene el alfoz de Burgos o su capital incluidas en alguna Denominación? O simplemente ¿cuántas cepas tiene? Que yo sepa no es zona vitivinícola.

¿Por qué Burgos, que se queja del centralismo de Valladolid, pretende hacer lo mismo ahora con una parte de la provincia que le parece rentable? Sencillamente, no me lo explico. Quizás por egoísmo y avidez por acaparar.

¿Apoyaría la capitalidad burgalesa  las manifestaciones contra empresas contaminantes en el medio rural (macrogranjas, plantas de eliminación de desechos…)?, ¿favorecería el desarrollo de energías limpias aunque no llegasen a la capital? No lo tengo nada claro. Alegarían que estos temas no les competen.

Creo que en Burgos van a la suya, y es lógico. En este mundo tan dividido, intentar hacerse con la parte jugosa de cualquier asunto está bien visto. Y no. No todo vale. 

Señor Suárez, por favor, revise sus intenciones, porque muy lógicas, la verdad, no son.