Cristina García Benedicte

Plaza Mayor

Cristina García Benedicte


Hablando de falta de rentabilidad

25/01/2025

Si no hay servicios, no hay médico, no hay autobuses y no hay carreteras, ¿cómo quieren que haya gente? Parece que los reveses al mundo rural no paran de sumarse y todo por una supuesta falta de rentabilidad. Pero rentabilidad económica, claro, porque en esta sociedad todo está supeditado al dinero.

Sólo es válido aquello que proporciona un retorno, que nos hace multiplicar la inversión, que es productivo. En lugar de buscar un bienestar social o mejora en las condiciones, nos obcecamos en obtener algo material a cambio. Nos matamos por ganar más dinero y no somos capaces de parar y respirar lo que obtenemos en otros sentidos.

Pero vamos a retroceder, que me desvío. La cuestión que nos atañe tiene que ver con el retorno económico y se olvida del social.  Deja de lado a las personas y se centra  en que no se pierdan recursos, no se preocupa en quiénes, de verdad, podrán aportar riqueza en el futuro. Y todo esto tiene que ver con esa búsqueda de soluciones cortoplacistas. Parches que nos van poniendo para que nos callemos y que parece que calman los ánimos, pero que, ya sabemos, que a la larga, no van a solucionar nada.

Y en esa sociedad vivimos, en una en la que  sólo se piensa en la inmediatez, en la recogida rápida de los frutos y en las grandes masas de gente. Nos hemos olvidado de lo pequeño y lo que se cuece a fuego lento. Hemos rechazado la calma y hemos dejado de escucharnos (a nosotros y entre nosotros). Así que, nuestro entorno rural, que representa toda esa paz, se ve ninguneado y maltratado de forma directa e indirecta. Todo ello, a pesar de haberse convertido desde hace tiempo en una de las pocas soluciones para devolvernos una salud mental cada vez más necesaria.