Miguel Ángel Pinto

La Mirada Ambiental

Miguel Ángel Pinto


Félix Rodríguez de la Fuente

13/03/2025

Mañana es un día especial en el calendario, pues un 14 de marzo de 1928 nacía en Poza de la Sal uno de los personajes más destacados de nuestro país. Tras corretear de niño por Los tres cielos de su pueblo, sintió la necesidad de comunicar y transmitir su pasión por la Naturaleza al resto de la sociedad. Su palabra llegaba a todas las personas y tenía muy claro el papel de la educación para la concienciación de las nuevas generaciones. Grandes naturalistas, agentes medioambientales, biólogos, ingenieros de montes y educadores ambientales -entre estos últimos me incluyo-, le deben su temprana vocación. Asimismo, recordamos otro 14 de marzo -esta vez de 1980-, en el que falleció en Alaska en un accidente de avioneta.

Félix Rodríguez de la Fuente pertenecía al movimiento conservacionista y bebió de una variada cantidad de fuentes, haciendo de España un país más concienciado de la necesidad de la conservación de la Naturaleza. También aportó nuevas ideas sobre la protección de la naturaleza y su conocimiento. Por ejemplo, a través de su enciclopedia Fauna (1970-1973) las ideas de Rachel Carson, Jane Goodall o Jean Dorst -figuras internacionales muy importantes de los movimientos ecologista y conservacionista- llegaron a nuestro país, suponiendo el punto de partida para la creación de una nueva forma de mirar la Naturaleza y la vida del ser humano que, hasta ese momento, no se había planteado en España.

En el recuerdo colectivo español, Félix Rodríguez de la Fuente ostenta un lugar destacado. Las personas que conformamos la Generación Félix mantenemos esta remembranza y la intentamos proyectar hacia el futuro, con la esperanza de que no se pierda con el paso de los años con conmemoraciones cada 14 de marzo. Ahora bien, el mejor recuerdo que podemos hacer es continuar a diario con la labor que el mismo Félix nos pedía a través de su Carta a los Linces de 1972: Yo os pido una vez más que veléis por la integridad de nuestra fauna; yo os pido una vez más que cada uno de vosotros sea como un guarda honorario de nuestra Naturaleza. […] Porque ¿sabéis una cosa? Vosotros, los niños, vosotros los jóvenes, sois los que más vais a perder si se deteriora el equilibrio ecológico de nuestra patria. Y es cierto, porque ya estamos perdiendo.