Rosalía Santaolalla

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Rosalía Santaolalla


Aforo completo

02/02/2024

Empezó el concierto llegando al escenario desde el vestíbulo, recorriendo el pasillo del patio de butacas, con ese 'tumbao' que tienen los portugueses al cantar, esa mezcla de fragilidad y plasticidad. Su banda, un grupo de jóvenes lleno de talento, le esperaba arriba, sobre las tablas. Cuando llegó a la mitad del pasillo se dio la vuelta, miró hacia arriba y no pudo disimular una expresión de sorpresa: en los palcos había muy pocos espectadores. Salvador Sobral actuó el viernes pasado para, calculo, menos de medio aforo en el Teatro Principal y para los que estábamos fue una delicia, pero no dejamos de tener la impresión de que esas butacas vacías pertenecían a personas que se habían perdido algo: o no se habían enterado de que Sobral había incluido Burgos en su gira o habían preferido hacer otras cosas o, simplemente, era fin de mes y qué mes, enero ni más ni menos. El concierto fue muy bonito, por cierto. Al que fuera ganador de Eurovisión con una de las canciones menos eurovisivas que se recuerdan también se le resisten algunas plazas, visto lo visto el pasado viernes, así que una se hace una idea de la zozobra que tiene que sentir cualquier artista cuando se pone en ruta y a merced del público. 

Solo quien ha arriesgado así sabe lo que cuesta ocupar todas y cada una de las butacas de un teatro o colgar el no hay entradas en una sala. Afortunadamente para el público, todavía hay a quien le gusta sentir esa punzadita en la boca del estómago y se embarca en proyectos artísticos con ambición y ganas. Ahí están los Fetén, Jorge y Diego, que lo mismo llevan los trastos de tocar a las plazas de los pueblos más pequeños que te llenan, como este domingo, un Circo Price de Madrid armados con su música de raíz. O las más de cincuenta personas que han invertido esfuerzo, alma y corazón en llevar a la escena Minatchi, la ópera recuperada de Antonio José, que se estrena en el Principal dentro de un par de semanas. Creo que aún se sigue diciendo 'mucha mierda'. Pues eso.