María Albilla

Plaza Mayor

María Albilla


¿Estoy guapa, Rufino?

05/12/2023

Hace unos días, mi amiga Magdalena y yo compartíamos un ratito de conversación. Intentaba ella poner una tirita a mis quejas sobre cuánto nos sometemos -me someto- al juicio de los demás y lo permeables que somos a las opiniones ajenas cuando ella me contó una anécdota de su infancia. Me decía que cuando era niña tenía una melena preciosa que su madre peinaba cada mañana con primor. Un día con trenzas, otro día un moño bien pulido... y que ella, corría a la puerta de su vecino y le preguntaba: «¿Estoy guapa, Rufino?». Estallamos en una carcajada que bien valió haber madrugado ese día.

Cuando todavía me iba riendo del buen Rufino y la cara que pondría cada día al ver la angelical y coqueta sonrisa de mi querida Magdalena, escuché en la radio que la artista catalana Alicia Framis se va a casar el verano que viene con un holograma en una ceremonia que se celebrará en Róterdam (Países Bajos) y que incluirá un banquete molecular apto para humanos y humanoides. Desde ese momento, el holograma para mí se empezó a llamar ¡Rufino!

Framis, que está diseñando su propio vestido de novia, ha creado la performance La primera mujer que se casa con un holograma a través de Inteligencia Artificial, pero asevera que con él (AILex, si nos atenemos al nombre del holograma), no pretende sustituir una opción real de compañero de carne y hueso. Apunta que su futuro esposo le da una compañía estable y que incluso, como en una relación convencional, puede llegar el desamor. Desde luego, Framis no tendrá nunca la necesidad de llamar a la puerta de su vecino el día que surjan dudas sobre si está guapa y bien peinada, ya que su espejito, espejito mágico será un ente tecnológico. 

Lo mejor de este Rufino new age es que, si no te gusta lo que opina, siempre puedes darle al off y se terminó la historia. En realidad, exactamente lo mismo que deberíamos hacer con las opiniones de los demás que están de más e incluso con las nuestras propias. Apagar y listo.