Juan Manuel Pérez

Plaza Mayor

Juan Manuel Pérez


Bautizando las calles

07/10/2024

Don Ramiro, el profesor que nos intentaba enseñar Latín en segundo de B.U.P., siempre recurría al mismo chiste para llamarnos cazurros: «Era invierno, hacía mucho frío, caían cosas blancas... ¿qué eran?... ¡Moscas blancas!». Lo he recordado estos días después de asistir expectante al próximo reto que se ha propuesto la capital, una vez que ya hemos conseguido la facultad de Medicina: buscar un nombre apropiado al bulevar. «Es un bulevar, por allí pasaba el ferrocarril, ¿cómo lo llamamos?...». En este afán por preguntar de todo a los burgaleses, en la comisión de Personal del Ayuntamiento andan barruntando la posibilidad de convocar una consulta y que decida el pueblo. El riesgo serio es que ocurra como en el famoso plebiscito que organizó el exalcalde Daniel de la Rosa para que los vecinos de Gamonal decidieran en torno a la avenida comercial de la calle Vitoria, en la que no participó ni el tato. Pero consultar, se consultó. 

No parece lo más oportuno que nuestros próceres se dediquen a desperdiciar su talento en estos asuntos menores, cuando todo el mundo sabe que al bulevar del ferrocarril los burgaleses le vamos a seguir llamando 'bulevar del ferrocarril', por mucho nombre pomposo o ilustre con que se le termine bautizando. Además de ser una pérdida de tiempo, resulta que la denominación del común es muy pertinente. El tren formó parte de la vida -y la muerte- de varias generaciones de burgaleses. Las vías marcaron el día a día de miles de ellos, sobre todo de los que residían en la zona sur.

Fueron las movilizaciones de la ciudadanía, hastiada por los atropellos y por tener que 'sobrevivir' en unos barrios divididos por el muro de la ignominia, las que provocaron que las administraciones avanzaran en el proyecto para sacar el tren del centro de la Cabeza de Castilla. De proponer algún nombre, ninguno mejor que uno que recordara a esos burgaleses que se levantaron contra esa frontera de la vergüenza. A esos ciudadanos anónimos de los que solo se acuerdan los políticos en las campañas electorales y que no andan pidiendo que les pongan una calle, aunque se la merezcan.