Esther Alonso

Ser o Tener

Esther Alonso


Burgalés José

19/02/2025

Me encantan los cantautores. De siempre. Poesía pura hecha música para despertar almas dormidas, cansadas, calladas. Indiferentes. Poesía pura en movimiento para insistir que no está todo perdido. Poesía para no olvidar que, aunque unos tengan menos que otros, unos no son menos que otros. Sin embargo, la canción protesta no está de moda. Porque la protesta ya no tiene forma de poesía, sino de post en una red social y de meme de wasap.

Las protestas son cosa del siglo pasado. Aunque, la verdad sea dicha, en Burgos no hemos sido nunca muy protestones, ni siquiera en el siglo XX. Hemos sido más de quejarnos para adentro que para fuera. Más en la casa que en la plaza. Da igual que se trate de un problema de infraestructuras, que de violencia de género. De empleo, que de ubicación de las barracas. De evitar la tala de unos árboles, que de exigir subida de las pensiones. De hecho, si tuvieran que bautizarnos con dos apellidos, el primero de ellos sería Abnegado y, el segundo, Resignado: Burgalés José Abnegado Resignado. No queda mal.

Pero si en algún momento enterramos las movilizaciones de forma definitiva fue el 14 de diciembre de 2008, fecha en la que quedó oficialmente inaugurada la estación de ferrocarril Rosa de Lima Manzano, dando por finiquitada la larga y justa lucha de los vecinos de la zona Sur de la ciudad para que se llevaran del corazón del barrio a las vías asesinas. Y aunque mención aparte merecen las movilizaciones violentas de 2014 en Gamonal (a mi juicio no tuvieron nada de lucha poética), lo cierto es que, en el primer cuarto de este siglo, apenas ha habido un puñado de movilizaciones importantes. La última, este otoño, para evitar la cancelación de la ayuda municipal a las organizaciones que trabajan con personas migrantes. Y tuvo sus frutos, demostrando que, cuando las protestas se llevan a cabo debajo del balcón de la Administración interpelada, tienen más efecto.

No obstante, creo que cuando Bob Dylan escribió: How many times can a man turn his head and pretend that he just doesn't see? (¿Cuántas veces puede un hombre girar la cabeza y fingir que simplemente no ve lo que pasa?), se inspiró en Burgos. Debe ser por eso que amo su canción Blowing in the wind.