Aurelio Medel

Hecho a mano

Aurelio Medel


Defensa vasca

08/03/2025

El entusiasmo de Donald Trump con Vladimir Putin y su desprecio a Europa han despertado al Viejo Continente de un pasado reciente de valores compartidos. Hoy, si Europa quiere ser autónoma tiene que rearmarse hasta los dientes, algo que ya han asumido hasta los más pacifistas. 

Si la UE incrementa el presupuesto en defensa hasta un 3% del PIB, tendrá que gastar 200.000 millones más al año. Esta cifra es una enorme oportunidad para la industria española de Defensa, así lo ha visto el Gobierno español, como es lógico, y el Gobierno vasco, que se ha lanzado en campaña, demostrando una vez más su olfato y capacidad de anticipación.

A mediados de febrero, el lehendakari, Imanol Pradales, presentó la iniciativa Grupo para la Defensa Industrial. Cambias el orden de las palabras sale la traducción que hizo el vicelehendakari, el socialista Mikel Torres, que sin tapujos dijo que la industria militar vasca está ante un oportunidad única y la van a apoyar. Semanas después, los presidentes de los gobiernos de España y Euskadi se juntaban para inaugurar unas nuevas instalaciones de la empresa de motores ITP Aero en Zamudio (Vizcaya), una compañía participada por la semipública Indra (9,5%) y el gobierno vasco, a través del fondo Finkatuz.

Tras la invasión de Ucrania, Pedro Sánchez decidió montar un grupo de industria militar alrededor controlado a través de Indra, empresa en la que el Estado tiene un 28% y suma la mayoría al incorporar a la guipuzcoana SAPA (8%) y al grupo madrileño Escribano (14%). Son los mismos socios que comparten el capital de Tess Defence, fabricante de vehículos de combate, junto a la americana General Dynamic. Indra también ha adquirido el 80% de Hispasat, y cuenta con una filial para satélites de uso militar, Hisdesat, donde el único socio privada, es la vasca Sener.

Hay que reconocerlo, políticos y empresarios vascos están en otro nivel y no es sólo cuestión de privilegios (cupo vasco). Apoyar la industria de militar es invertir en innovación, que acaba en so civil, y defender mejores sueldos. El País Vasco tiene los salarios más altos de España, las mayores cotizaciones y, por tanto, las mejores pensiones. En febrero pasado, la pensión media de España fue de 1.500 euros. En Euskadi,1.829, la más alta, y en Burgos 1.588 euros. Qué cierto aquello de si vis pacem, para bellum.