José María Vicente

El Rincón de...

José María Vicente


Tente mientras cobro

17/12/2024

La situación política española está tan desquiciada que el juego se centra en obviar la realidad para sustituirla por otra pseudorrealidad a la medida de los intereses de su autor. La reunión del viernes pasado en Santander de los presidentes autonómicos con el Gobierno ha sido un esperpento difícil de superar. Menos mal que estaba el Rey para dar un toque de distinción, ya que todo lo demás está a un nivel manifiestamente mejorable. Para Sánchez el éxito estuvo en la foto de todos los presidentes con él. Mejor dicho, de él con todos los presidentes. No parece muy difícil conseguir la asistencia de los díscolos cuando se les compra con el dinero de todos los demás. La absoluta ausencia de acuerdos en los temas tratados en la sesión es lo de menos. Lo importante es la foto. Todo eso mientras el mismo día los enviados de Sánchez estaban en Suiza negociando el cheque con el que retrasar el chantaje unos meses más dando protagonismo a un prófugo de la justicia española cuyo cometido es ridiculizarnos. El 'tente mientras cobro' aplicado a la política.

Paralelamente, el morbo parecía estar centrado en cómo sería el forzadísimo saludo entre Ayuso y Sánchez y si las críticas de Page serían lo suficientemente altas y claras. Tengo que admitir que Page no me ha decepcionado aunque no consiga ganar acólitos a su disidencia dentro del partido. Por el contrario, lo que creo es que llevará semanas examinando con lupa todos los mensajes que le lleguen del entorno Sánchez para evitar caer en la trampa que le haya diseñado el gabinete que le acabe llevando a una dimisión que allane el camino a su sustituta. Ya se sabe lo que pasa cuando has perdido la confianza del 'puto amo'. Antes o después te levantas compartiendo la cama con una cabeza de caballo. Poca broma cuando el que manda nota que alguien le está revolviendo el gallinero. Y eso es todo lo que da de sí nuestra política. Mientras el presidente parece tener serios reparos a asistir al funeral de Valencia para evitarse un nuevo abucheo y la hostilidad de las masas no tiene el menor inconveniente en mantenerse dentro de su zona de confort para hacer el enésimo anuncio de creación de miles de viviendas públicas que no construirá nunca y que ninguno de sus incondicionales osará cuestionar.